
Libro: Tengo Liquen Escleroso. ¿Y ahora qué hago? Monografía sobre el Liquen Escleroso Vulvar. Autora: Dra. Patricia Gutiérrez Ontalvilla (cubierta)
El liquen escleroso vulvar es un trastorno que provoca manchas blancas en la piel, haciéndola lucir más delgada de lo normal. Por lo general, afecta la zona genital y el ano. Si bien cualquier mujer puede contraer esta enfermedad, resulta más común en las mujeres que ya han atravesado la menopausia.
Según los especialistas de la Fundación Nixarian, las mujeres afectadas por esta patología sufren una afectación significativa en la calidad de vida y de la función sexual. Esta organización privada sin ánimo de lucro se dedica a la divulgación, investigación y tratamiento de esta condición.
Liquen escleroso vulvar: una enfermedad que podría afectar a 100.000 españolas
Según el estudio Bleeker, realizado en el año 2016, la incidencia de esta patología ha aumentado de 7,4 a 14,6 casos por cada 100.000 mujeres por año desde 1991 a 2011. Este incremento puede estar relacionado con una mayor concienciación acerca de esta enfermedad. De esta manera, hay más mujeres que acceden a realizarse biopsias y pueden conseguir un diagnóstico certero.
A su vez, según indican en la Fundación Nixarian, hoy en día el liquen escleroso podría afectar a cerca de 100.000 mujeres en España, o sea, a 1 de cada 300 mujeres adultas. La falta de precisión en esta cifra se debe a que se trata de una enfermedad considerada como «vergonzante», por lo que hay muchas mujeres que no se han diagnosticado aún. Además, los síntomas y signos, sobretodo en estadíos iniciales, son parecidos a los de otras enfermedades mucho más comunes por lo que las mujeres con Liquen Escleroso Vulvar tarden una media de 8 años en recibir un diagnóstico correcto.
Por ahora, la causa de esta patología es desconocida, aunque se estima que puede estar relacionada con diversos factores. En este sentido, la incidencia de la enfermedad aumenta cuando existen antecedentes familiares y enfermedades autoinmunes, sobre todo tiroideas.
Signos y síntomas del liquen escleroso
Debido a esta enfermedad, es frecuente sentir dolor y quemazón, ya que la piel sufre fisuras en las zonas genital y anal. Además, el liquen escleroso produce un picor continuo en esta área, que provoca trastornos en la vida cotidiana y puede llegar a alterar el sueño del paciente.
Otro síntoma común es la dispareunia, o sea, experimentar dolor durante las relaciones sexuales. En los casos más graves, este cuadro puede llegar a ser incapacitante.
En cuanto a los signos físicos, la afección de la piel provocada por esta patología puede provocar que las mujeres vean que los labios mayores y menores de la vagina desaparecen y que se estrecha el introito. A su vez, también es frecuente sufrir fimosis del clítoris, es decir, el enterramiento de este órgano sexual debajo de una piel esclerótica y cicatricial. Por último, el picor y el consecuente rascado suele derivar en sangrados.
Según los profesionales de la Fundación Nixarian, es necesario difundir más información sobre el liquen escleroso para que más personas puedan acceder a un diagnóstico, ya que se estima que el 6 % de las mujeres que no se tratan desarrollan cáncer vulvar. A la misma vez, también es importante una mayor formación para que así los profesionales puedan especializarse en esta dolencia en concreto y ayudar a los pacientes que acuden a consulta con un cuadro médico de este tipo.